Locura y Arte: Mujeres (Programa Temático)
#Hexen 22.06.2017 : Programa Temático: Locura y Arte Parte III: Mujeres
Libro: Locura y Arte: Adrián Sapetti
Editorial Lea. Buenos Aires 2011
Capítulo: Locas de Amor
Playlist: https://clauzzen.org/hexen/playlists/
Introducción: https://clauzzen.org/hexen/introducciones/
Lecturas: Fragmentos de lo leído en Hexen
Sylvia Plath: La Mujer está terminada
La de Sylvia Plath fue una vida corta y trágica. Había nacido el 27 de Octubre de 1932 en Boston, Estados Unidos. Era una joven rubia, muy bella, hija de un descendiente de alemanes. Consideraba a su padre un tiránico, un opresor de quien sentía que no podía liberarse, a pesar de que fallece cuando ella tiene nuevo años.
La muerte del padre marca a la niña a lo largo de su vida. Se le mezclan sentimientos de odio por el abandono y la opresión, a la vez que una identificación con el padre en el anhelo de seguir sus pasos: morir y abandonar a sus hijos, por lo cual algunos la comparan con Medea.
Hay algo en sus escritos que nos da miedo, sobre ellos se cierne un sentimiento macabro de fascinación con lo fanático y el suicidio, algo que nos deprime y sacude.
Se vislumbra un afán de venganza con la figura paterna, a la cual de manera ambivalente execra y extraña, revivido en el penoso lugar que tienen los varones en su obra y en el rencor hacia el amante que la deja y al que quiere lastimar con su autodestrucción. Su vida es un aviso permanente de la muerte que va anunciando en sus poemas.
Cuando tenía 20 años Sylvia robó somníferos, se escondió en un rincón oscuro del sótano y se encerró en un armario. Se tragó el frasco entero. La encontraron de casualidad. La internaron en una clínica psiquiátrica y le hicieron un tratamiento de electroshocks, procedimiento que se repetiría en otra oportunidad.
En la madrugada del 11 de Febrero de 1963, poco después de escribir “Filo”, en su casa de Londres, subió al cuarto de sus hijos y les dejó pan con manteca y leche, antes de que llegara la niñera. Bajó a la cocina, selló con paños la puerta y la ventana, abrió el horno, metió la cabeza dentro y giró la llave de gas. Tenía 30 años. Había dejado una nota diciendo: Por favor llamen al médico. Era un acto incongruente e inexplicable ante la irrevocable decisión final. Su trágico destino no termina allí: su hijo Nicholas también se suicida a los 47 años.
Alejandra Pizarnick: El ángel petrificado.
Nació con otro nombre, Flora, en Buenos Aires, el 29 de Abril de 1936, en el seno de una familia de inmigrantes rusos. Desde joven tuvo problemas con su aspecto físico y padeció trastornos de alimentación, por lo que comienza a tomar anorexígenos. También padece insomnio, acné y asma. En contraposición, tiene una hermana bonita y atractiva con la cual no puede competir ante los ojos de su madre. Se refugia en la lectura y se aísla. Además tartamudea.
Se inscribe en la carrera de Filosofía. Intenta mitigar su depresión analizándose con León Ostrov, de quien, según algunos, se enamoró.
Viaja a París, donde permanece desde 1960 a 1964. Allí conoce a Julio Cortázar, con quien la ligará una duradera amistad. Durante esos años lee y traduce a Rimbaud, Baudelaire, Lautremont, Breton y el surrealismo.
En sus “Diarios”, alude abiertamente a su bisexualidad, su lesbianismo, sus fantasías incestuosas y masoquistas, a sus orgasmos, las alusiones a supuestos abusos y violaciones.
Siempre vivió angustiada por el miedo a enloquecer.
El 25 de septiembre de 1972, mientras pasaba un fin de semana fuera del Servicio de Psiquiatría del Hospital Pirovano donde estaba internada por una depresión mayor, Alejandra se fue a su departamento y se tomó una sobredosis de barbitúricos.
Virgina Woolf: Bendita Soledad
Adeline Virginia Stephen nace el 25 de enero de 1882 en Kensington, Londres. Cuando fallece su madre tiene 13 años y padece su primera depresión. Psicoanalistas y biógrafos refieren que sus hermanastros Gerald y George abusaron sexualmente de ella durante su infancia y adolescencia. Repetidas crisis la llevan a intentar suicidarse dos veces: La primera se tira de una ventana demasiado baja, la segunda, entra en coma a causa de la ingestión de barbitúricos.
Continúan sus crisis depresivas y hay quienes sostienen que las irrupciones de los delirios en los que pierde la conciencia de realidad y de situación, coinciden con los momentos en los que termina de escribir alguna de sus novelas.
Forma parte del célebre Grupo de Bloomsbury, que reúne escritores, pintores, economistas, ensayistas y críticos. Además, se convierte en una de las pioneras del feminismo.
El día 28 por la mañana (Marzo 1941), a los cincuenta y nueva años, aquejada calvez de una enfermedad bipolar, se suicida, cargando sus bolsillos de piedras, tirándose en el río Ouse, cerca de su casa de Sussex. Antes había escrito una carta de despedida a su marido.
Cuando perciben que no vuelve a la casa salen en su búsqueda. Quince días después, unos chicos ven el cuerpo flotando en el río Ouse, cubierto con un abrigo; en sus bolsillos, aún quedan algunas piedras como símbolo del peso que en la vida había tenido que soportar la gran Virginia Woolf.
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